34 familias de Curanilahue se certificaron en reparaciones domiciliarias básicas y chocolatería en el marco del Programa Quiero mi Barrio del sector Buena Esperanza. Se trata de dos talleres gratuitos solicitados por la propia comunidad para la generación de micro emprendimientos, principalmente de las dueñas de casa.
“Estamos orgullosos de estar culminando nuestra acción social en Buena Esperanza con estas dos intervenciones. Tras más tres años de trabajo ya estamos llegando a la etapa final de este programa con grandes obras físicas, pero también de otras en beneficio del crecimiento personal de las familias, con más de 30 talleres y capacitaciones hoy podemos decir que dejamos un barrio más preparado y con un capital humano enorme”, señaló Claudia Toledo, seremi de Vivienda y Urbanismo.
El Taller de Reparaciones Domiciliarias Básicas, tuvo una extensión de 6 semanas en las cuales el monitor y prevencionista, Iván Muñoz, enseñó a 19 vecinos y vecinas del sector a realizar instalaciones eléctricas y de gasfitería. Mientras que el Taller de Chocolatería y Elaboración de Productos Gourmet, impartido por la monitora, Solange Muñoz, se extendió por 8 semanas en las que 15 vecinas se capacitaron en el oficio de preparación de chocolates y diversos productos gourmet.
“Agradecemos a todos los vecinos y vecinas que han participado de estos talleres, por la confianza que han depositado en el equipo de barrio y también agradecer la labor de los talleristas locales, que han impartido estos talleres en conjunto al Quiero mi Barrio. Felicitamos a todos y todas quienes han sido parte de los talleres y esperamos que cada uno de ellos continúe poniendo en práctica lo aprendido y puedan también transmitir los conocimientos con familiares, cercanos, vecinos; ya que ese es el sentido de este programa, no quedarse uno con lo vivido, si no que compartir experiencias. Esa es una de las cosas más importantes para que podamos avanzar como pueblo”, comentó Alejandra Burgos, alcaldesa de Curanilahue.
“El Programa Quiero mi Barrio, ha entregado muchas herramientas a todos los vecinos y vecinas de nuestro sector, en esta oportunidad también quise ser parte de uno de los talleres, para compartir con distintos vecinos y vecinas, además de los más jóvenes. Es bueno ver que siempre los talleres se ven marcados por el compañerismo y se van creando los lazos entre los participantes”, sostuvo Ruth Pérez Troncoso, presidenta del Consejo Vecinal de Desarrollo.