El Congreso aprobó la glosa presupuestaria que permitirá garantizar la continuidad para 2026 del Plan de Fortalecimiento Industrial de la Región del Biobío.
La aprobación, está inserta en la Partida 31 del Proyecto de Ley de Presupuestos, la que regula el financiamiento de los gobiernos regionales. Con esta decisión, el Biobío podrá sostener iniciativas orientadas a aumentar la productividad, promover la innovación, acelerar procesos de reconversión industrial y consolidar un ecosistema económico que dialogue de manera directa con las prioridades territoriales.
Además, la glosa faculta al Gobierno Regional (Gore) para participar en el financiamiento de programas del Ministerio de Economía y proyectos de investigación e innovación liderados por universidades y agencias nacionales como Corfo y Anid, siempre y cuando estos se ejecuten dentro de la región.
La medida también refuerza los mecanismos de rendición de cuentas: los gobiernos regionales deberán informar trimestralmente sobre la ejecución y destino de los recursos asociados, un elemento que, según diversas autoridades, permitirá fortalecer la transparencia y la trazabilidad de los fondos.
Institucionalidad para el diálogo productivo
Carolina Parada, secretaria ejecutiva del Plan de Fortalecimiento Industrial, fue quien subrayó que la aprobación de la glosa representa “una excelente noticia para el Biobío”, tanto por dar continuidad al trabajo ya realizado como por entregar estabilidad al llamado Foro Estratégico, un espacio de articulación entre autoridades, academia, empresarios y sindicatos.
Parada destacó que el plan, presentado oficialmente en septiembre de 2024, venía desarrollándose hace más de dos años: “Hemos sostenido un diálogo permanente que, en la práctica, refleja cómo la transformación industrial de la región no depende de un solo gobierno, sino de nuestra capacidad de mantener un trabajo conjunto”.
La continuidad del Foro, recordó, era una petición reiterada en sus últimas sesiones, y la glosa ahora lo dota de institucionalidad al entregar recursos operacionales a la corporación Desarrolla Biobío, la entidad que asumirá la administración de este espacio.
La ejecutiva afirmó que el Foro Estratégico llevaba tiempo solicitando un marco institucional que asegurara su futuro, y que Desarrolla Biobío, a cargo del Plan Biobío 2050, es la entidad que naturalmente lo acogerá.
“Tenemos logros importantes y otros desafíos pendientes. Lo fundamental es que esta glosa permite una transición ordenada hacia el Plan Biobío 2050, iniciativa planteada por el gobernador regional, en la que tendremos que revisar y priorizar metas de corto, mediano y largo plazo sobre la base del trabajo ya avanzado”, explicó.
Consultada sobre si el Plan de Fortalecimiento podría renombrarse como Plan Biobío 2050, Parada fue enfática: “El nombre no es lo central. Lo que importa es que hemos logrado resguardar un diálogo social que la región necesita mantener”.
A esto añadió la relevancia de sostener un vínculo permanente con el Ministerio de Economía: “Ese nexo nos permitirá mantener al gobierno central más cerca de las necesidades reales del Biobío”.
Sobre el monto exacto de la glosa fue prudente, indicando que no entregaría cifras mientras el Congreso no concluyera su votación en sala.
El rol del Senado y la mirada del oficialismo
El senador (PS) Gastón Saavedra, quien impulsó la glosa durante la discusión legislativa, remarcó que los recursos aprobados permitirán que el Plan mantenga sus actividades ahora bajo la órbita directa del Gobierno Regional y de la corporación Desarrolla Biobío.
Según detalló, se trata de “una transferencia del orden de los $160 millones”, además de la posibilidad de contratar un consultor externo con un monto adicional cercano a los $75 millones.
Saavedra añadió que estos fondos permitirán financiar gastos de personal, bienes y servicios y cualquier insumo necesario para materializar las iniciativas productivas que se definan. “Con esta aprobación estamos tranquilos”, afirmó, subrayando que la continuidad está asegurada al menos durante 2026 y que la región podrá avanzar “con serenidad hacia una transición justa”.
Proyección hacia el 2050
El gobernador regional, Sergio Giacaman, también valoró la voluntad política del Ejecutivo y del senador Saavedra para impulsar la glosa, aunque dejó claro que esta no busca perpetuar el Plan de Fortalecimiento Industrial tal como existe actualmente.
“Lo que se busca es generar recursos para contratar equipos que trabajen en un plan de largo aliento, que permita al Biobío proyectar sus desafíos hacia el 2050”, explicó, recalcando que esto abre paso a lo que su administración denomina Plan Biobío 2050.
Giacaman destacó que la glosa no amarra cargos ni estructuras del gobierno anterior, algo que agradeció explícitamente. “Nos permite conformar un equipo idóneo para liderar un proyecto de esta envergadura”, señaló.
Sin embargo, fue crítico respecto del presupuesto asignado para la región: “Responsablemente planteamos una propuesta de $225 mil millones, basada en compromisos heredados. Ahora recibiremos prácticamente lo mismo que en 2025 (más de $133 mil millones), lo que nos obliga a ajustar expectativas y priorizar junto a las comunas y el Consejo Regional”.
Economía destaca modelo colaborativo
Para el Seremi de Economía, Javier Sepúlveda, la glosa “llega en un momento crucial para el Biobío”.
Para la autoridad económica, este respaldo legislativo valida un modelo de articulación público-privada que se ha consolidado como un referente a nivel nacional.
La continuidad del Plan, añadió, es especialmente significativa ante el complejo escenario económico internacional, donde contar con instrumentos sólidos es clave para responder con agilidad a los cambios del mercado.
Sepúlveda destacó que uno de los mayores valores de la glosa es que mantiene activa la gobernanza del Plan: “Sostiene los espacios donde se toman decisiones colectivas y donde participan todos los actores relevantes del ecosistema productivo del Biobío”.