Es inconcebible pasar un verano sin usarlas, tanto mujeres como hombres acuden a las chalas y sandalias para mantener los pies frescos y cómodos durante las altas temperaturas.
Este tipo de calzado dio origen a todos los zapatos que conocemos actualmente y que se remontan al Antiguo Egipto, donde se confeccionaban chalas con paja trenzada o láminas de hoja de palmera y era utilizado solo por hombres en ceremonias.Más tarde los romanos adaptarían este invento convirtiéndolo en un símbolo de status social y amuleto de buena suerte.
Tiempo durante la oscura época de la Edad Media, su componente simbólico es totalmente ignorado y lo estético se vuelve predominante, dando origen a la confección de zapatos hechos para ocultar las deformidades de los pies. Sin embargo, fue en al revolución francesa cuando se dio paso a un zapato más cómodo, similar al que encontramos actualmente.
La microcomunitaria Roxana Carrasco, realizó un interesante recorrido por la historia de las sandalias y dio ejemplos de íconicos diseños de estas, desde los soñados modelos de Christian Louboutin hasta las rupturistas apuestas de artistas de la talla de Katy Perry.