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El Campanil recuperó la memoria y goleó a Santiago Morning en El Morro

Diario Concepción
Fotografía: Comunicaciones Fútbol UdeC
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Necesitaba volver al triunfo y a anotar. Y en un partido que se le abrió temprano a su favor, la UdeC superó con contundencia a Santiago Morning en El Morro y cortó una recha de cuatro encuentros sin festejar en la Primera B.

El inicio del duelo fue parejo, sin ningún equipo que tomara el control. Sin embargo, a los 12 minutos llegó una jugada que cambió el trámite: Ormeño agrede a Iam González y el juez Ahumada le mostró la roja. El local quedaba en superioridad numérica muy pronto y lo supo aprovechar pronto.

A los 23’ Oyanedel realizó un gran cambio de frente para Sebastián Molina, quien realizó un excelente control con el que se sacó la marca. Luego, habilitó a Fuentealba, que solo ante el arco la empujó para abrir la cuenta. Así, el Campanil cortaba una mala racha de 241 minutos sin marcar en el torneo.

El “Chago” lucía golpeado, y los auricielo hicieron lo que debían: no baja el pie del acelerador para buscar el segundo. Y llegó a los 31’, cuando Romo habilitó de gran forma a Iam González, y el mejor jugador de la UdeC en el campeonato, tras un buen control, definió con remate colocado al segundo palo.

En el resto del primer tiempo, se le anuló un gol a Herrera por offside y el Campanil tuvo otras chances, pero el marcador no se movió. En el complemento, el local encontró pronto el tercero, con un gran zurdazo de Fuentealba tras un córner que dejó sin opciones a Arana a los 54’.
González tuvo su segundo tanto a los 61’, pero Arana estuvo notable en el achique (iba solo Herrera por el medio). El Campanil no bajaba el ritmo ante un rival golpeado, y siguió atacando. A los 67’, Herrera remató de zurda y Arana despejó, y un minuto después el meta mexicano, figura pese al resultado, le sacó un disparo a quemarropa a González.

Luego, Muñoz sacó a González y Fuentealba, entendiendo que el duelo ya estaba totalmente decidido. Y los 74’, de forma un tanto imprevista, llegó el descuento de la visita, con un disparo desde larga distancia que sorprendió a Campestrini.

Cuando parecía que se complicaba el trámite, Sebastián Molina sacó un zapatazo de unos 30 metros para poner el 4-1. Y en los descuentos, Olivares puso el quinto con un remate que se desvió en Estay, descolocando a Arana.

La UdeC sube a 14 puntos, y quedó de momento en el séptimo puesto, volviendo a zona de liguilla. Y sobre todo, recuperando confianza y gol, algo que puede ser muy importante de cara al futuro.