Durante la jornada de este sábado, la lluvia dio una tregua a los vecinos de Curanilahue, la comuna que más sufrió con el sistema frontal en la región del Biobío. Hasta el lugar llegaron más de 40 efectivos militares para ayudar a los vecinos afectados.
Por su parte, el alcalde de Curanilahue, Luis Gengnagel, señaló que es necesario gestionar la entrega de carbón para que los vecinos puedan secar sus viviendas. Además, manifestó que se otorgarán colchonetas y frazadas a los afectados.
Alex Villegas, uno de los damnificados, se lamentó por la pérdida de algunos de sus electrodomésticos. “Tengo un refrigerador que me había comprado el lunes, lo alcancé a usar un día”, relató.