Con éxito resultó el operativo del Centro de Rescate y Rehabilitación de Fauna Silvestre de la Universidad de Concepción, en conjunto con el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG), para la liberación de una pareja de quiques en un predio agrícola en Chillán, Región de Ñuble.
El trabajo colaborativo de las instituciones contó con la rehabilitación de los mamíferos para asegurar que sobrevivan en el medio silvestre.
“No es fácil rehabilitar a un cachorro de cualquier especie tan joven como un neonato, que ha pasado horas en el frío, sin comer y que ha tenido que cambiar su hábitat. Tampoco es fácil educarlo para que se comporte como un animal silvestre normal”, detalló la Dra. Paula Aravena, directora del centro de la casa de estudios en Noticias UdeC.
Se trata de una hembra, única sobreviviente de tres recién nacidos encontrados huérfanos en un campo en Los Ángeles, y un macho hallado en un predio de Talca. Ambos fueron trasladados al Centro de Rehabilitación de Fauna Silvestre de la Universidad de Concepción.
En la misma línea, la Dra. Aravena informó que el primer ejemplar llegó en malas condiciones, pesando 160 gramos, desnutrido, deshidratado y con parásitos externos. Estado que cambió en la institución, logrando un crecimiento saludable.
Asimismo, la académica explicó que el quique es un animal social y que vive en grupo familiar, por lo que la llegada del macho fue de gran ayuda. “Al cabo de dos días, ya eran inseparables. Ahí comenzaron en una vida juntos en el Centro de Rehabilitación en una jaula grande, donde había enriquecimiento ambiental, cambio de dieta permanentemente; se hicieron pruebas de cazas y ambos cazaban juntos”, detalló.
Sin embargo, esta situación no es común, ya que la especialista comentó que “en pocas ocasiones se puede juntar con otro ejemplar de la misma especie, edad y condición similar, y en este caso se pudo gracias a la colaboración de SAG Biobío, que aporta la hembra; SAG Maule, que aporta al macho, y SAG Ñuble, donde está nuestro centro de rehabilitación. Y hoy, que se han habituado al clima de Ñuble, es idóneo poder liberarlos en esta zona intermedia para que sus hijos y nietos puedan colonizar y cumplir su rol en el ecosistema”.
Por su parte, el Director Regional (s) del SAG de Ñuble, Roberto Ferrada, señaló que “los quiques son mamíferos silvestres, protegidos por la Ley de Caza, por lo que el Servicio Agrícola y Ganadero tiene un rol muy importante en su protección. Esta especie contribuye al ecosistema como controladora de plagas como ratones, lauchas, palomas y conejos. Por eso, llamamos a la comunidad a que avise al SAG cuando encuentren este tipo de animales, a que los cuiden, porque son aliados nuestros”,
Además, los directivos destacaron el trabajo de los estudiantes de medicina veterinaria de la universidad, quienes trabajan de forma voluntaria en el centro de rehabilitación.
