Por Pablo Carrasco
“Queremos y creemos que a partir de lo ocurrido, lamentablemente el día de ayer, pueden estar más cercanas las voluntades para poder avanzar, porque todos necesitamos tener carreteras más descongestionadas para avanzar en horas puntas, no necesitamos una restricción de todo el día ni todo horario, pero sí necesitamos tener vías más expedidas para el transporte público y para la ciudadanía en horarios punta. Eso es lo que le pedimos al seremi de Transporte, se lo hemos encargado y esperamos que en la próxima semana esta mesa se active”.
Esas eran parte de las palabras del subsecretario de Transportes, Jorge Daza, un día después de la colisión entre un taxibús y uno de los trenes de pasajeros que realiza el servicio entre San Pedro de la Paz y Coronel, y que dejó a 7 personas fallecidas. En ellas explicaba el sentido de la aplicación de una restricción vehicular, que a contar de este jueves, comenzará su periodo de fiscalización legal y donde el incumplimiento será sancionado con multas.
Evaluación
Y es que tal como se definió, la medida ya está instaurada hace desde el pasado 4 de septiembre a través de una marcha blanca que se extendió hasta este miércoles, pero no es la primera vez que la medida se aplica, ya ocurrió durante marzo tras la falla del Puente Ferroviario, misma situación que en la actualidad, solo que esta vez, se sumó la tragedia en el cruce ferroviario de Boca Sur.
Por ello, tal como las autoridades tienen su balance sobre ella, los conductores de transporte público tiene la suya sobre su real efecto a la hora de descongestionar y quitar vehículos particulares de la Ruta 160 y Avenida Pedro Aguirre Cerda, y entre ellos esta Domingo Oportus, presidente de un sector de los choferes de la zona, que mantiene dudas sobre la medida.
“Pueda efectivamente, ahora que van a pasar multas de verdad, a tener algún efecto en que haya menos tránsito por ese tramo de la Ruta 160 y por el Pedro Aguirre Cerda (…) pero yo sigo insistiendo que la persona que tiene dos o tres autos va a ocupar el otro. El que tiene un autito a lo mejor, no. El que tiene más vehículos lo va a ocupar igual, así que yo creo que lo que va a mejorar no va a ser lo que ellos requieren realmente”, indicó el dirigente sindical.
En este sentido y manteniendo una visión crítica de la realidad que se vive en el Gran Concepción, Oportus emplazó a las autoridades a tener respuestas y planes preventivos más consolidados.
“Yo creo que ya tienen que empezar a trabajar en un plan. Ese puente vive fallando. Vive fallando, lo choca una piedra y se echa a perder”. “Aquí son las autoridades las que tienen que aprender un poquito más, nada más. Que no podemos seguir viviendo de la manera que estamos. La gente ya está aburrida, está aburrida el transporte, está aburrida todo”, agregó.
Funciona
Una visión más favorable al efecto que tuvo la marcha blanca de la restricción vehicular impuesta para los vehículos particulares en un tramo de la comuna, tiene Claudio Guerrero, dirigente del sindicato de conductores de la Línea 23 San Pedro del Mar, la misma a la que pertenecía el conductor que manejaba el taxibús que colisionó con el Biotrén.
“Sí, por lo menos esta semana han disminuido los atochamientos por Boca Sur. Y esto en Boca Sur era producto de toda la gente que viene por Lomas (Coloradas) y entraba ahí en el Santa Isabel, en la paradero del kilómetro 14 (Ruta 160) y hacen el ingreso por el interior y trataban de salir después por Michaihue o Boca Sur y por lo menos ha disminuido el taco en ese sentido”, explicó.
“Realmente tiene un efecto. Los camiones siguen casi igual. Hay un disminución de camiones, pero no algo tan claro”, agregó.
Desde esta perspectiva el representante de una parte de los conductores de esta Línea, aseveró que una buena medida para enfrentar la congestión sería mantener la restricción para los vehículos menores de manera permanente o al menos hasta que existan alternativas viales que permitan hacer tránsito más expedito.
“Sí, de todas maneras, si fuese permanente es, entre comillas, la gran solución. Pero se contrapone con los problemas de movilidad, porque la locomoción no está a la altura de las circunstancias. Porque estamos claros que faltan conductores. El Biotrén tampoco da abasto. Entonces, topamos en un tema de movilidad de las personas”.
“Es fácil así, con análisis, decir la restricción funciona, pero hay mucha gente que va a tener problemas de movilidad. Entonces, una cosa tiene que ir de la mano de la otra”, cerró Guerrero.
Transporte de carga
Quienes también han visto con buenos ojos la aplicación de la medida ha sido el gremio que moviliza las cargas por carreteras en la zona. Así lo ratificó el representante de uno de ellos, Daniel Meza, director de Camioneros del Sur, que agrupa a transportistas desde Rancagua a Punta Arenas, quien detalló que la restricción se ha notado. “Sin duda que sí, el tránsito se ha regulado, ya es menos estresante ir a Coronel y entiendo que las personas que utilizan la ruta se sienten un poquito más favorecidas por la cantidad de autos que andan circulando”.
Respecto del uso de la Ruta a Patagual como un alternativa para la circulación de camiones, el dirigente gremial recordó que ese acuerdo lo alcanzó la Corma con la autoridad para sus cargas, pero que para el resto dicha vía no es una alternativa por que es insegura, acotó.
“Lo que pasa es que Patagual nunca conversó el diseño con la realidad de la carga. Es una vía que se hizo para ayudar a los camiones con carro y rollizos forestales, quienes pueden circular por dicha vía, pero nuestros camiones tienen otras características. De hecho, un camión con contenedor es peligroso para la ruta”, afirmó.
Sobre si mantener la medida en el tiempo, Meza coincidió en que el gremio la ve como necesaria.
“Me encantaría que fuera una opción a largo plazo debido a que el crecimiento del parque automotriz de vehículos particulares ha crecido demasiado, además de la alta densidad demográfica que hay en San Pedro de la Paz”, finalizó el representante de un sector de los dueños de camiones de la Región.